Primera versión, estrenada en el CAAM, Las Palmas de Gran Canaria.
Cuatro visitantes se visten de unos chalecos reflectantes y se mueven como si fueran fichas interactuando con la instalación. En un sistema de realimentación, la posición de cada visitante selecciona un grupo de granos sonoros (microfragmentos) que rotando entre los cuatro formarán el ritmo de la pieza.
Las imágenes corresponden al estreno realizado en el magnífico proyecto «Laboratorio B9» de Miguel Pons cuando Franck González era el director del CAAM, pocos proyectos del CAAM han tendido tan buena acogida, repercusión y entidad creativa. Y debo reconocer que la instalación junto con otras ( junto con otras instalaciones en ese mismo día, Paisajes remontados…) fue fantástica por parte del equipo de mantenimiento. Unos craks. Hay que señalar que el día antes todo funcionó perfecto en la performance «30´con agua» con una complejidad tremenda. Que todo estuviera montado al siguiente día es un 10. Lo dicho Miguel Pons por su proyecto B9, y al equipo de mongaje un diez por cada uno.
Junto a esta instalación interactiva juego y arte sonoro, presenté otras dos instalaciones hechas con Max:
